
Sorprende este título palestino con sello feminista. Con un ritmo más lento al que nos tienen acostumbradas las películas de espionaje, reflexiona sobre los motivos que nos llevan a tomar decisiones.
Sorprende este título palestino con sello feminista. Con un ritmo más lento al que nos tienen acostumbradas las películas de espionaje, reflexiona sobre los motivos que nos llevan a tomar decisiones.
La concentración de personajes dispares con diferentes situaciones personales y sociales en un hospital era prometedora. No obstante, el guion no logra proponer una historia redonda y la película acaba repitiéndose.
El segundo film de Sylvie Ohayon es un extraordinario reflejo de procesos por los que pasan muchas personas. Es un título exquisito, cercano, con los detalles muy cuidados y de gran calado.
Laura Mañá dirige una comedia que logra su objetivo de hacer reír. El título cuenta con un elenco solvente, canciones pegadizas, conversaciones divertidas y una historia más profunda de lo que parece inicialmente.
Hollyblood hace parodia de los clichés de las películas de vampiros para adolescentes. Aunque el largometraje falla en algunos aspectos, el guion es capaz de crear varias escenas ocurrentes que divertirán a la audiencia
La adaptación de las revelaciones de un infiltrado de la policía francesa es demasiado larga y confusa. Aun así, cuenta con interpretaciones verosímiles y algunos diálogos para reflexionar.
Selman Nacar debuta con un largometraje que arranca con un accidente laboral. A partir de algo corriente, plantea un interesante debate, con ritmo constante, aunque lo deja inconcluso.
Los hermanos Russo vuelven con una película protagonizada por actores de renombre. Destacan su escenografía y sus intachables efectos especiales, así como la naturalidad del montaje de las secuencias de acción.
La ópera prima de Michael Sarnoski no es la película de venganza que puede parecer. Al contrario, sorprende por su seriedad, su emotividad y la profundidad del tema que refleja. Nicolas Cage despunta con su actuación.
La película expone la tensión que vivió Mali tras su independencia. La ambientación, la música y la exposición de las relaciones humanas en esa sociedad dividida entre la tradición y la revolución está bien lograda.