
La primera serie de Amenábar es desequilibrada pero conforma un thriller de aventuras muy entretenido que reivindica el patrimonio español.
La primera serie de Amenábar es desequilibrada pero conforma un thriller de aventuras muy entretenido que reivindica el patrimonio español.
Quien mucho abarca… ciento volando. Y es que Jaguar no se concentra. Se pierde entre querer proponer algo nuevo y algo viejo, algo divertido y algo dramático, algo creíble y algo increíble y, así las cosas, ¿la vemos o no la vemos?
Un drama familiar desesperanzador y desesperante que mantendrá al espectador en vilo por saber qué pasará. Los actores, por su parte, brillan con sus interpretaciones.
La creación de Steve Martin es una divertida comedia con un reparto veterano y un misterio interesante. No es épica pero sí entretenida y agradable.
Guy Ritchie retorna con remake que resulta una nueva propuesta de acción, violencia y velocidad, ejecutada con pericia y solvencia. Nada nuevo bajo el sol, tampoco el hieratismo de su protagonista.
La apasionante historia de Elliott, un joven antropólogo que quiere estudiar a los Otopis y que emprende un viaje para conocerles, resulta en una divertida película que combina comedia y aventuras, con Catherine Deneuve en el elenco.
Hecha para atrapar al espectador en una ratonera de mentiras y secretos. Las emociones se disparan y disculpan la poco verosímil evolución de la trama.
La noche invade la trama principal, pero la oscuridad no es solo exterior sino que habla también de sus personajes, sus historias y su manera de entender la vida.
A modo de thriller, el film recoge la persecución religiosa en la Checoslovaquia comunista de los años 80. De una gran sobriedad formal, el relato también abunda en los conflictos generados por traiciones e iglesias paralelas.
Crímenes, investigaciones, relaciones personales y un personaje extremo que es el centro y el motivo principal para ver la serie.