7 cajas

Pocas películas nos llegan de Paraguay. En un primer momento, algunas producciones latinomericanas cuestan al gran público. Su tono dramático y de denuncia, aunque necesario y vital, acaba relegándolas a salas más minoritarias. 7 cajas, en cambio, conjuga la denuncia con el entretenimiento basado en el suspense y el humor negro.

El film muestra la penosa situación de la gente trabajadora del Mercado de la Asunción. Deben superar todo tipo de vicisitudes para conseguir un poco de dinero y cubrir necesidades esenciales como medicamentos, comidas o un parto digno. Sin embargo, el guionista y director, Juan Carlos Maneglia, teje a su alrededor una trama surrealista, donde conviven personajes cuerdos con otros más disparatados, debido a su obsesión por ganar plata. Unos por motivos loables y otros por enriquecimiento personal.

A Magnelia siempre le había fascinado el mercado de la Asunción. Un punto de encuentro donde podían surgir todo tipo de relatos, un hervidero de vivencias y experiencias. Un espacio perfecto para situar su historia entre sus enrevesados pasillos y su amalgama de culturas, cuyo héroe pertenece al más bajo escalón de la diferencia de clases, el carretillero.

Rodada casi toda en guaraní, la lengua indígena que habla el 90% de la población paraguaya –a excepción de alguna escena en español-, 7 cajas cautiva por la ingenuidad de su personaje principal y su denuncia, implícita pero latente, en una trama que ofrece también dosis de intriga y humor negro. Así es que quedó finalista a mejor película latinoamericana en los Goya y ganó en la categoría “En construcción” del Festival de San Sebastián.

Firma: Montserrat Bros