A hundred flowers

A Hundred Flowers muestra la realidad que sufren muchas personas frente al Alzheimer y los problemas existentes en las relaciones entre madres e hijos.

Sobre la producción, es una cinta oscura, sensible y con un ritmo pausado que te va adentrando en los sentimientos de cada personaje. Cabe destacar la música, que envuelve cada momento, da continuidad a la expresividad, los recuerdos y los sentimientos, y ayuda a mantener la emoción en las secuencias.

La película permite reflexionar sobre lo importante que es la comunicación y estar cerca de tus seres queridos.  Además, muestra la realidad de padecer una enfermedad que te roba los recuerdos y transmite la dificultad resultante para los familiares que intentan conservar dichas memorias presentes. Las escenas cotidianas se vuelven pesadillas para la propia persona, que se da cuenta de sus descuidos, y para sus parientes.

En el film vemos cómo, por un lado, Izumi quiere olvidar ciertos aspectos de su pasado, mientras que Yuriko lucha por no olvidar. Su dolencia va avanzando y cada vez la realidad es más confusa y se distorsiona con el pretérito.

Ambos tienen muchos reproches y reviven una y otra vez el pasado intentando superar los problemas de su relación. Es gracias a ayudar a su madre a recordar que Izumi y Yuriko se acaban perdonando y uniendo nuevamente.

Firma: Nerea Andreu