Amor a medianoche

Amor a medianoche adapta en una versión Hollywoodiense la película japonesa del 2006 Taiyou no Uta. La chica Disney Bella Thorne, que ya se ha hecho mujer, sigue sus pasos en la gran pantalla en una producción que parece ser un capítulo alargado de Shake it up (o cualquier otra serie de Disney Chanel). Su compañero de reparto es Patrick Schwarzenegger, el hijo de Arnold, que también parece ser primerizo ante la cámara. El resultado es algo muy romántico y un tanto empalagoso.

A ritmo de videoclip con hogueras, fiestas americanas, sueños cumplidos y otros que no se cumplirían, los dos protagonistas desafían un guión sin interés. Procuran darse al máximo ante la cámara y resultan convincentes en muchos momentos, pero donde no hay talento no se puede poner un parche. Por ejemplo, es un despropósito cómo se finge que Bella toca la guitarra.

Sin embargo, esta versión barata de Un paseo para recordar (Mandy Moore y Shane West) hablará a los corazones sensibles y a los adolescentes que busquen un producto blanco y humano.

Firma: Carla Sciamma