Borgo

Inspirado en una historia real, Stéphane Demoustier se adentra en una posible trama que expone ciertos engranajes de la isla de Córcega. En una sólida primera parte, el cineasta retrata con maestría tanto a la sociedad corsa como el micro universo formado en la cárcel, que funciona de manera prácticamente independiente.

Tranquilamente, entre dos líneas temporales paralelas, la audiencia va saltando de la vida de Melissa, la funcionaria de prisión, a un crimen que se ha cometido en el aeropuerto. En esa alternancia, el director hace uso de diversos planos sugerentes y elegantes que dejan al público participar del relato con sus propias reflexiones.

A partir de la mitad de la cinta, la parte de thriller adquiere más peso y se agiliza el ritmo. Ahí se plasma con destreza cómo algunas relaciones, aparentemente inocentes, dentro de la mafia pueden llevar sutilmente a grandes conspiraciones. En ese entramado, la interpretación de Hafsia Herzi es esencial tanto para dar coherencia y naturalidad a los hechos y a su evocador personaje como para mantener la atención del espectador. La actriz hace un trabajo magnético que, junto con la realización medida, permiten que el metraje de dos horas no se haga ni lento ni pesado.

Firma: Patricia Amat