Guardianes del museo

Aún en la actualidad, el Museo Hermitage de San Petersburgo alberga, además de sus innumerables obras de arte, una cualidad muy curiosa: alrededor de setenta gatos patrullan y limpian de ratones los sótanos de la institución. Este peculiar cuerpo de vigilancia se remonta al siglo XVIII, cuando se reclutó a cientos de felinos para que acabasen con una plaga de ratas que asolaba el palacio. Con gratitud, en reconocimiento a este hecho y porque realmente son útiles, allí sigue siempre una “patrulla gatuna”.

Basándose en este hecho, Vasiliy Rovenskiy dirige esta película de animación simpática y ágil, que tiene como público principal a los más pequeños. Llena de buenas intenciones y sin un minuto de respiro, Guardianes del museo presenta un guion disparatado que sobrevive a golpe de piruetas, caídas y efectos muy logrados pese a la sencillez de los dibujos.

En definitiva, un film de calidad regular, pero que entretendrá a los más pequeños de la casa y les enseñará, con gracia, valores como el respeto, el trabajo en equipo, la lealtad o el servicio.

Firma: Esther Rodríguez