Las invisibles

Los relatos de superwoman están de moda, aunque su enfoque no sea siempre el acertado. Es fácil caer en la tentación de retratar a la mujer como alguien infranqueable, o que todo lo puede y todo lo aguanta, o como un tiburón laboral, o como alguien a quien se le disculpan muchas cosas debido a lo que sufre.

El director de Bienvenidos al Norte esta vez elige pincelar a una mujer muy real a la que justifica, pero también da caña. Después de más de un año de “trabajo de campo” en albergues y en la calle, fija la mirada sobre dos categorías de mujeres invisibles para la sociedad: las sin techo y las asistentas sociales.

No solamente ha contado con la participación de actrices profesionales, sino que ha decidido que el resto del elenco sean chicas reales. Y tras numerosos talleres y 150 entrevistas de una hora con mujeres que han pasado por un proceso de reinserción, se escogió al reparto.

Con exquisito respeto se acerca a sus vidas y les facilita motes bajo los cuales ellas puedan sentirse seguras e interpretar el papel sin ser juzgadas. Esto hace todavía más real el guion que, ya de por sí, tiene todos los elementos de una tragicomedia. El público queda absorto por el relato admirando cómo estas completas, conmovedoras y divertidas invisibles afrontan su realidad a pesar de ser dramática.

Firma: Carla Sciamma