El reino de los elfos

Las producciones animadas chinas de bajo presupuesto se suelen presentar con un rasgo en común: parecen versiones en ordenador del manga. Hace poco lo veíamos en El reino de las ranas.

Esta cualidad no es negativa, pero sí que es cierto que aporta un aire muy particular a las películas. Por un lado, los personajes se presentan muy sexualizados (especialmente los femeninos); los ropajes son cortos y marcan las curvas; y las premisas en las que se apoya la trama están basadas en las relaciones amorosas imposibles. Por otro, también juegan mucho con la psique emocional del espectador. Los tiempos se detienen en cámaras lentas, las conversaciones son pausadas y con contundencia, aparece algún que otro drama adolescente, etc.

Asimismo, El reino de los elfos es un film enfocado a un público infantil, que no solo flaquea por los lados que hemos mencionado, sino que también aporta grandes dosis de oscuridad. La antagonista se parece más una alma-diva-encorsetada que invoca espíritus a lo Harry Potter que a cualquier personaje de Disney ¿En qué momento se perdió el interés por los antagonistas “normales” como Úrsula de La sirenita?

Firma: Carla Sciamma