Smallfoot

Esta mezcla entre Happy Feet, y El hijo de Bigfoot aporta el ritmo y los blanquecinos paisajes de los pingüinos cantarines y un giro a la leyenda del mismo Big Foot. Y es que, cuando pensamos que las ideas están agotadas, no hay más que esperar, ya que de vez en cuando algún mix aparece.

El español encargado de crear la franquicia de Mi villano favorito, Sergio Pablos, escribió Yeti Traks. Es en este cuento en el que se basa Smallfoot. El guión lo trabaja y dirige Karey Kirkpatrick (escritor de Chicken run). La verdad es que se nota el talento que todos aportan: la animación es perfecta, la trama es entretenida, las canciones son pegadizas, los personajes tienen fondo…

No obstante, el film se encara a un problemilla. En su afán de crear un guión que aporte algo (cosa de agradecer), el mensaje termina siendo bastante confuso para el público infantil y tremendamente aleccionador. Bajo el lema “la verdad es mejor que vivir una mentira”, se lanzan preguntas que quedan semi-abiertas como ¿qué es la verdad?; ¿hay mentiras piadosas en las que creemos que fueron creadas para proteger el mundo? o ¿hay pueblos que viven felices bajo la ignorancia?

Sin embargo, y pese a que la repetición de dichas ideas termine aburriendo un poco, es gratificante ver que se quiere hablar sobre honradez e integridad.

Firma: Carla Sciamma