
Otro thriller de espías, esta vez situado en las calles de Raqa, que mantiene el suspense de los dos protagonistas (un inspirado Álvaro Morte acompañado de Mina El Hammani) en su ardid por conseguir el objetivo.
Otro thriller de espías, esta vez situado en las calles de Raqa, que mantiene el suspense de los dos protagonistas (un inspirado Álvaro Morte acompañado de Mina El Hammani) en su ardid por conseguir el objetivo.
La obra de Jorge Dorado intenta elaborar un retrato del tráfico de humanos en una película con un guion plano y sin un gran desarrollo de personajes, pero que gana mucho gracias a las escenas de acción.
Cuarta entrega, más psicológica que de acción, recurre al desconcierto y la las resoluciones inesperadas.
La primera parte resultó poco convincente pero la segunda lo empeora.
Ni un viaje emocional emocionante, ni un thriller con suspense, ni la investigación de una muerte sospechosa, ni nada sorprendente que no sepamos.
Solvente, imaginativa y bien atada ficción que no se libra de algunos «defectillos»
Un nuevo thriller con toques fantásticos del director de Contratiempo, que abunda en el suspense y el drama y en un elenco sólido de intérpretes.