
El director, guionista y actor Justin Chon lidera un film de denuncia social, justificado y con buenas intenciones. No obstante, el tono demasiado melodramático aleja al espectador que no quiera excesos.
El director, guionista y actor Justin Chon lidera un film de denuncia social, justificado y con buenas intenciones. No obstante, el tono demasiado melodramático aleja al espectador que no quiera excesos.
El debut de Elsa Amiel traslada a la gran pantalla el universo excéntrico de los culturistas. Gracias a una fotografía sugerente, la audiencia se sumerge en la dureza de ese estilo de vida que deja una sensación desagradable.
Drama playero adolescente en el que la amistad, la familia y el deporte juegan un papel muy importante. El reto de Summer es una serie más para pasar el rato.
Martín Cuervo debuta como director de largometraje con una mezcla de géneros llevada con acierto, unos actores más que eficaces y una propuesta arriesgada en cuanto al tratamiento de espacio, pero con buen resultado.
La cuarta temporada de Stranger Things mantiene el encanto y el buen nivel del inicio aunque esta vez con un tono más adulto, ya que madura a la vez que sus protagonistas. El éxito de los Duffer sigue apostando por la amistad y el trabajo en equipo.
Michael Keaton es un perfecto protagonista en una biografía correcta sobre el abogado que trabajó el fondo de compensación a las víctimas del 11S. El film plantea cuestiones complejas y cuenta con personajes bien definidos.
El segundo largometraje de Lara Izagirre cohesiona muy bien un argumento medido, un elenco verosímil y lleno de naturalidad, una fotografía y dirección artística eficaces y un final bien cerrado.
Es como viajar a la década de los 60, con sus acontecimientos históricos, sus peculiaridades, sus costumbres, sus coetáneos y ese ritmo elegante que nos imaginamos en cualquier espía inglés.
Una muy buena serie de temas legales, donde se entremezclan perfectamente la profesión y la vida privada de Michael Haller. Adrenalina pura entre jueces, fiscales, expedientes y demás.
Lo que le falta de lógica y fuerza narrativa al guion, lo contrarresta el clima de suspense y angustia que se consigue mantener durante todo el film, que cumple con las expectativas de quienes busquen un rato de tensión.