The Inquisitor

La crítica del principiante

Una ambientación medieval con toques de fantasía, investigación vampírica y temas de religión de por medio… La combinación es tan explosiva como sugerente. Os presentamos The Inquisitor, un juego con buenas ideas, pero al que le falta un poco de cocción.

Una trama oscura

The Inquisitor nos sumerge en un mundo medieval oscuro y lleno de misterios en el que encarnamos a Mordimer Madderdin, un inquisidor encargado de mantener a raya a brujas y vampiros de la Europa del siglo XVI.

El pretexto de la historia es de lo más rompedor: Jesucristo no murió en la cruz, sino que se reveló ante el mal de los hombres, convirtiéndose en rey del mundo. De este modo, los inquisidores se erigen como aquellos encargados de impartir la justicia divina en la tierra y nosotros somos uno de ellos.

La ambientación, punto diferencial

En The Inquisitor la ambientación es un elemento esencial para sumergirnos en la trama. Desde los oscuros callejones de la ciudad de Koenigstein, el detalle minucioso de estandartes, mercados e iglesias, cada escenario está muy bien diseñado diseñado para transmitir una atmósfera de ese medievo tardío que favorezca el misterio. A todo ello también favorece la iluminación tenue, los efectos climáticos y los sonidos inquietantes.

Quien mucho abarca…

No os vamos a negar que The Inquisitor atrae desde un primer momento y no solo por su historia o su ambientación. El juego toma elementos prestados de grandes juegos, como The Witcher 3, Vampyr e incluso L.A. Noire.

El sistema jugable combina elementos de aventura, RPG y acción. El juego se estructura siguiendo un mismo patrón lineal, al más puro estilo del citado L.A. Noire. Visitamos sitios, conversamos con personajes, guardamos información valiosa, investigamos escenarios y resolvemos algunos puzles. En general, todo está bastante guiado, pero no transmite esa sensación. Quizás se hubiera agradecido un mundo algo más abierto, pero el resultado tampoco nos desagrada. Por ello, pese a que por ambientación es más similar a The Witcher que a otros juegos, no sería justo compararlo con el Triple A de CD Project.

En cuanto al combate, lo cierto es que bastante tosco y rudimentario. Es cierto que no es el punto esencial del juego ni pretende serlo, pero podrían haberlo depurado más. Si lo comparamos con el nuevo Alone in the Dark, donde el combate también es secundario, aquí todo resulta más duro y forzado, siendo una de las partes que menos nos ha gustado del juego.

Por otro lado, además de explorar Koenigstein, también visitaremos lo que podemos denominar inframundo, en un intento por aportar variedad al juego y romper con la línea del conjunto. Estas fases nos ayudan a conocer datos de nuestra investigación y su estructura es más similar a la de los juegos de sigilo. Lo cierto es que funcionan, pero pensamos que el conjunto funcionaria igual sin ellas.

Por todo ello, The Inquisitor es un juego de contrastes que, en líneas generales, funciona. Y, sobre todo lo hace gracias a su trama y a su ambientación. No ocurre lo mismo con el nivel gráfico, otro de los puntos de mejora del juego. No tanto por la falta de calidad del juego -aunque se nota el presupuesto más limitado, sino por la falta de pulido general (pequeños bugs, saltos visuales en las secuencias…). Pese a todo, se puede disfrutar sin problema.

Lo mejor:

La trama.
La representación de Koenigstein genera gran ambientación.

Lo peor:

Errores técnicos que entorpecen la experiencia.
Gráficamente tiene muchos contrastes.
El combate no es del todo satisfactorio.

Conclusiones:

The Inquisitor es una aventura diferente a lo que estamos acostumbrados. Recordando tiempos pretéritos, las sensaciones a los mandos me resultan similares a cuando disfruté de títulos como Murdered Suspect, Vampyr o Call of Cthulhu. Se trata de juegos que apuestan por una historia potente, oscura y adulta, así como una ambientación sólida para ofrecer al jugador una aventura que atrape. Por lo demás, un título de aventuras correcto, aunque con un sistema de combate con fallos y un mundo excesivamente encorsetado.

En cuanto al contenido, es un juego claramente enfocado al público más adulto, tanto por la oscuridad de la trama como por el gore y lo explícito de algunas imágenes (cadáveres, cuerpos semidenudos…).

La edición física The Inquisitor Deluxe Edition para PlayStation 5 y Xbox Series X ya está disponible e incluye la banda sonora original, el compendio digital y el atuendo de Gran Maestro.