
Alberto Utrera presenta una cinta muy arriesgada tanto en su despliegue visual como en la mezcla de géneros y tonos. Con todo, logra una propuesta criminal atractiva y con humor que hace disfrutar.
Alberto Utrera presenta una cinta muy arriesgada tanto en su despliegue visual como en la mezcla de géneros y tonos. Con todo, logra una propuesta criminal atractiva y con humor que hace disfrutar.
Otro thriller de espías, esta vez situado en las calles de Raqa, que mantiene el suspense de los dos protagonistas (un inspirado Álvaro Morte acompañado de Mina El Hammani) en su ardid por conseguir el objetivo.
La magistral fotografía de Borgo, el elenco entregado, el ritmo medido y la dirección sólida de Stéphane Demoustier logran que el público sea absorbido por este drama carcelario y se le pase la película en un suspiro.
La premisa del film de Kiyoshi Kurosawa con una crítica al capitalismo y una atmósfera bien construida titubea en el rumbo que debe tomar y se estrella en un conjunto de secuencias cargadas de teatralidad.
El método Knox es un thriller dramático con un gran reparto y una solvente dirección que equilibra con habilidad el misterio y la tragedia. Es, además, un retrato del avance de la demencia y de las relaciones paternofiliales.
Eduard Fernández protagoniza de forma desbordante e hipnótica este retrato sobre un embaucador que abre un espacio para indagar en torno a temas como la verdad, la mentira o la memoria histórica.
Este solvente drama judicial con una correcta realización atrapa principalmente por su premisa, su disyuntiva ética y dos solventes protagonistas. Todo ello conforma una propuesta que entretendrá a cierto público.
Una desconcertante y disfrutona comedia dramática que sorprende con su premisa, entretiene en su realización y se sostiene con buenos secundarios. No apta para todos, si uno se queda en la superficie puede resultar absurda.
La infiltrada es más que un thriller trepidante basado en hechos reales, es una reivindicación del papel de las mujeres en la policía con trabajados personajes que fluctúan entre lo profesional y lo personal.
Un trágico acercamiento biográfico a la figura de Hildegart Rodríguez al estilo de los actuales true crimes. A pesar de su falta de sutileza puntual y su cambio de tono, queda una propuesta adulta interesante sobre la que poder discutir.