Enredos románticos y suspense en la película de Woody Allen, que sigue los patrones de su filmografía, pero con una mayor frescura ausente en sus últimas obras. La correcta propuesta indaga en las tóxicas dinámicas de pareja.
Enredos románticos y suspense en la película de Woody Allen, que sigue los patrones de su filmografía, pero con una mayor frescura ausente en sus últimas obras. La correcta propuesta indaga en las tóxicas dinámicas de pareja.
Caos desenfrenado en esta entretenida propuesta de los dos fieros y archiconocidos personajes. Un previsible guion que se sostiene por la acción constante y el nivel visual que estimula al espectador.
Great absence crea un gran impacto emocional gracias a sus descripciones minuciosas y al reparto. Aunque el exceso de metraje y de flashbacks provocan desequilibrio, en su conjunto es una notable película.
La propuesta denuncia el encierro que vivieron los homosexuales en Alemania durante la posguerra. Es poco efectiva debido a su guion, aunque cuenta con un buen trabajo del elenco protagonista.
Una bienintencionada propuesta para los más pequeños que les entretendrá y les enseñará valores encomiables, pero cuyo disparatado guion desinfla el resultado final.
Aunque pueda ofrecer un rato ameno, esta comedia cae en lugares comunes que no la permiten asentarse. Aun así, junto a un dúo fraternal con química, deja mensajes valiosos en torno a la familia y en contra de prejuicios.
Una secuela que excede en epicidad a la primera, mientras mantiene los elementos que ensalzaban a su predecesora. Es sin duda una propuesta entretenida, donde en medio de toda la acción destaca un reparto sobresaliente.
La película de Guy Nattiv no es propiamente una biografía de Golda Meir, sino un relato que quiere justificar su actuación en Israel. Con una gran interpretación de Helen Mirren, funciona bien como thriller.
Veit Helmer dirige una obra visualmente atractiva con dos actrices carismáticas. Es una película para una audiencia selecta, que cuenta con un gran trabajo de cámara, una trama sencilla y mucha imaginación.
Jaime Rosales dirige un largometraje ciertamente convencional que flojea en su discurso. La exploración de los diferentes tipos de masculinidad solo se salva gracias al correcto trabajo de todo su elenco.