Alicia y Paco Luna escriben una trama carente de interés e interpretada por un actor que debería ser cómico, pero que tiene muy poca chispa.
Un film de temática homosexual que abunda en la situación que vivía, en los 90, una parte de este colectivo. Su propuesta narrativa se queda en un documento personal y de marcado existencialismo hedonista.
Potente ejercicio visual que ilustra la lucha obrera de cuando los trabajadores se mojaban por los derechos de todos y los sindicatos no vivían del cuento.
Un grandioso final para las 22 películas de Marvel Studios que no decepcionará a sus fans y les hará vivir una magnífica e irrepetible experiencia que, probablemente, no se parezca del todo a lo que esperaban.
Willem Dafoe interpreta uno de los mejores papeles de su carrera, en un film que rinde homenaje al genio neerlandés recorriendo, desde su mirada, los paisajes que le inspiraron su obra.
Verano del 84 es un homenaje al cine de género juvenil, una película para melancólicos, que comienza con un aire de Goonies que, poco a poco, se va transformando en una cinta de terror más propia de Stephen King.
Bella propuesta de la directora japonesa de Aguas tranquilas y Una pastelería de Tokyo que resulta, sin embargo, demasiado críptica y confusa.
Intenso y dramático thriller dirigido por Steve McQueen (Doce años de esclavitud) sobre las viudas de un grupo de atracadores que deciden acabar el último trabajo de sus difuntos maridos.
Sony nos cuenta los orígenes del simbionte de Marvel: la polémica está servida. La película es floja pero entretenida y un Tom Hardy a la altura saca su lado más cómico.
Una excelente ópera prima de Celia Rico. Su pulso en la cámara y dirección de actrices brillan y destacan de manera sorprendente en este vibrante homenaje a la relación madre-hija.