
Aunque aporta un desenlace poco evidente, la frivolidad del título monopoliza la historia y la priva de la frescura y originalidad que prometía el tráiler.
Aunque aporta un desenlace poco evidente, la frivolidad del título monopoliza la historia y la priva de la frescura y originalidad que prometía el tráiler.
Ripley es un relato en ocho capítulos para disfrutar de un guion inteligente y unas maravillosas interpretaciones. Sin embargo, hacen falta aguante y estómago.
Una historia bien contada pero llena de tristeza, de desgracias y de personajes que no pueden sonreír.
Blood & Water no cumple lo que promete. La producción sudafricana auguraba un sugestivo relato de suspense, pero ha resultado ser un drama adolescente de poco interés.
Alma da un paso más en el mundo de las ficciones adolescentes y se convierte en una propuesta válida para mentes adultas que no se dejen manipular por las emociones.
Esta propuesta de Netflix se queda a las puertas de convertirse en un título correcto. Aunque plantea una trama entretenida, las actuaciones exageradas y las incógnitas sin resolver no convencerán al espectador más crítico.
Mar de la tranquilidad es un título que gustará a quienes no esperen mucho de él. Estos conflictos generados por la ciencia necesitan una segunda temporada que resuelva las incógnitas planteadas.
Otra buena adaptación de una de las novelas de Harlam Coben para Netflix. Se consigue, sin grandes pretensiones, una entretenida mini serie que engancha desde el primer momento. El suspense está servido.
Serie llena de tópicos que empieza muy bien en la primera temporada, pero cae en picado en la segunda. Después se canceló. Podía haber sido una buena serie.
Ratched es una serie de crímenes y de maldad. Precuela sobre la perversa enfermera de la magnífica película de 1975 “Alguien voló sobre el nido del cuco”. Con un exceso de violencia y sexo que inunda y desfigura esta escalofriante serie.