Por siempre jamás

Cinco personajes para cinco capítulos en una historia de intriga y crímenes. Harlan Coben es el autor del libro en el que se basa esta miniserie francesa. Coben, prolífico escritor estadounidense, cuenta con una gran saga de novelas entre las que destacan las protagonizadas por el agente deportivo Myron Bolitar.

La serie, claro está, se toma sus licencias y traslada a las calles de Niza este drama que viaja del pasado al presente para narrar su historia. Lo curioso y lo mejor del título, además de su ambientación (más cercana al espectador por ser europea), es la construcción de sus personajes y la forma de dosificar la información.

Cada capítulo, dedicado a uno de los cinco personajes principales, va desgranando la personalidad y los motivos que le han llevado a la situación actual. Con ello, es fácil empatizar con cada uno y dejarse arrastrar por una trama que, ante todo, está muy alejada de la vida cotidiana de la mayoría. Secretos, crímenes, violencia, mentiras y sospechas se cuelan entre drogas, dinero, y corrupción. En definitiva, lo que hemos visto mil veces vuelve a ser interesante por quién lo vive.

La historia, por su parte, se empeña en rescatar a sus personajes, les da la oportunidad de rectificar y, aunque no siempre lo consiga, se esfuerza por transmitir la idea de que hacer las cosas bien es, muchas veces, la mejor opción.

Por siempre jamás es un título fácil, sencillo, que cuenta con giros inesperados (unas veces sorprendentes y otras no) y que seduce por su ritmo, su intriga, sus toques de acción y por esas personas a las que queremos acompañar.

Sin llegar a ser memorable, la serie es puro entretenimiento para aquellos que se refugian en los títulos europeos. Aunque el doblaje deja bastante que desear, al final uno se acostumbra a todo y, pasear por Niza es siempre un aliciente añadido.

Firma: Mar Pons