Otra vez, el narcotráfico es el eje de una ficción. Después del éxito de Fariña (en Antena 3), Vivir sin permiso arranca sin destacar. Sin embargo, estamos ante una producción realmente solvente. Interesan, sí, los trapicheos y los chantajes pero, quizá, interesa más el componente humano y la flaqueza de un protagonista al borde del precipicio.
El reparto coral y las historias secundarias –no por secundarias menos importantes– enriquecen una trama de poder y sumisión. Una sumisión que también afecta al más poderoso de los personajes.
Además, los bellos parajes, la ostentación de los ricos, la personalidad de los que viven bajo el yugo de la violencia, la ambición de unos y el orgullo de otros conviven en una producción estable y equilibrada.
Su gran virtud es situarse en el punto medio, entre la acción y el drama, la crueldad y la humanidad, el odio y el amor, la fuerza y la flaqueza. Sin olvidar que estamos ante una novela audiovisual, por tanto, siempre existe esa tendencia hacia la fábula dramática y la explotación de los estereotipos.
Firma: Mar Pons
Género: Serie
Subgénero: Drama
Año: 2018
Cadena: Telecinco
Intérpretes: Álex González, Àlex Monner, Claudia Traisac, José Coronado, Luis Zahera, Pilar Castro, Unax Ugalde
Presentador: -
Nemo Bandeira (José Coronado) es el hombre más poderoso de todo Oeste. Su empresa, Open Sea, es una conservera que da trabajo a gran parte de la población pero, también, es una tapadera para el narcotráfico.
Título original: Vivir sin permiso
Creador: Aitor Gabilondo
Director: -
Guión: Aitor Gabilondo, Manuel Rivas
Productora: -
Duración: 60'
País: España
Temporada: 1