Quizá hace algunos años, concretamente antes de 2005, La Fuga habría sido una ficción novedosa por su planteamiento y la originalidad de su guión. No obstante, en 2005 se estrenó una de las mejores series carcelarias de la historia de la televisión, alabada por la crítica y la audiencia. Prison break deleitó (con sus más y sus menos) durante cuatro temporadas a los espectadores que siguieron con entusiasmo las correrías de Scofield y sus compañeros. Ahora, con este precedente es difícil hacer una valoración objetiva y más, si los creadores de La fuga imitan desde el rol de los personajes hasta las transiciones de la serie de FOX.
Como viene siendo habitual, a nivel técnico (movimientos de cámara, luces, escenografía, etc) la producción española ha sabido adaptarse a los tiempos y se le reconoce el hecho de innovar, profundizar e invertir en esta área tan importante para la narrativa visual.
Sin embargo, una vez más, nos encontramos frente a una serie que promete más de lo que da. La fuga, tal como la definen su creadores, pretende vender una historia de amor profundo por el cual los protagonistas viven los mayores desafíos y peligros de su vida. No obstante, el planteamiento inicial es intrascendente. De tal forma que los primeros minutos, que deberían servir para asentar las bases de la relación de la pareja protagonista, sugieren un vínculo insignificante (15 días de relación, boda relámpago y cinco años de separación completa) y, por tanto, nada creíble. A partir de aquí no se puede construir un relato sólido.
Los personajes, al igual que la trama general, carecen de motivaciones convincentes y su falta de proyección les convierte en seres planos y poco sugestivos, por no citar algunas de las interpretaciones más mediocres que existen actualmente en la pequeña pantalla.
En conjunto, la técnica no consigue salvar un producto que imita otro de tan reciente emisión y, mucho menos, si se deja de lado el insustituible trabajo de guión y diálogos. La fuga es, a no ser que mejore con el tiempo, un espacio previsible, pobre, ambicioso en su planteamiento pero trivial en sus contenidos, nada persuasivo y totalmente prescindible.
Firma: Mar Pons
Género: Serie
Subgénero: Acción
Año: 2012
Cadena: Telecinco
Intérpretes: Aitor Luna, Asier Etxeandía, Luis Iglesia B, María Valverde, María Vázquez, Marian Álvarez
Presentador: -
En una sociedad en la que las reservas de petróleo están casi agotadas y los gobiernos han restringido las libertades con el supuesto objetivo de garantizar la paz y la seguridad a la población. Daniel Ochoa (Aitor Luna), un joven idealista que milita en un movimiento revolucionario denominado La Resistencia, termina encarcelado en La Torre por enfrentarse al sistema. Esta cárcel es una plataforma petrolífera situada en alta mar reconvertida en prisión de máxima seguridad.
Durante el altercado en el que fue detenido Ochoa, Anna (María Valverde), su reciente mujer y compañera de la resistencia, consigue escapar. Cinco años después, convertida en funcionaria y presentándose voluntaria para trabajar en la prisión, Anna consigue introducirse como miembro del cuerpo de seguridad dentro los muros de La Torre, la cárcel de la que nunca nadie ha conseguido escapar, con el único objetivo de liberar a su marido.
Título original: La fuga
Creador: Nacho Faerna
Director: Antonio Hernández, Vicente Peñarrocha
Guión: Joaquín Górriz, Nacho Faerna, Tatiana Rodríguez
Productora: Bocaboca
Duración: 60'
País: España
Programación: Dc - 22:30 h.