Dimensión, ambición e intención sobre tres aspectos que definen La peste además de, por supuesto, su título.
Cuando los creadores de una serie son dos cineastas como Alberto Rodríguez y su co-escritor habitual, Rafael Cobos, las expectativas se alzan y se espera un argumento y puesta en escena maduros y ponderados; algo que estaba presente en proyectos que han compartido como Grupo 7, La isla mínima o El hombre de las mil caras.
En su trabajo para la plataforma Movistar+ vuelven a indagar en el sur y su capitalidad, pero esta vez pretérita. Aprovechando su esplendor comercial y político y, al mismo tiempo, de decadencia e insalubridad, la serie reconstruye (y en algunos aspectos construye) una Sevilla fuente de numerosos y graves conflictos no solo de poder, sino sanitarios y, por qué no decirlo, mentales.
La ambición de La peste se explicita en lo que quiere abarcar, no solo físicamente (la dimensión) sino dramáticamente. Se pretende hacer un retrato hispalense que cuele por la vía de la verosimilitud histórica. Se quiere elaborar un guion que emule las explícitas (en imágenes) investigaciones de crímenes macabros que pueblan las ficciones contemporáneas. Se aspira a incluir en su trama las diversas redes de poder (político, eclesial, económico, ideológico, pasional…) que, según la serie dominaban la vida social y personal del momento.
Con estos tres rasgos, a los que se suma un diseño de producción sólido pero marcado por la suciedad, atisbamos que la sombra de HBO (como es fácil de adivinar) es alargada. Por eso y por la insistente y estereotipada imagen que da de lo que se entiende por Modernidad, es una lástima presenciar que la tendencia y la moda se hayan engullido la gran medida entre intenciones y resoluciones cinematográficas que Rodríguez y Cobos mostraban en sus anteriores títulos.
Con todo esto y con la molesta e innecesaria exhibición de vicios, abusos, cadáveres y llagas podridas, entre ratas y basura, La peste demarca bastante a qué espectador invita a su personal Sevilla.
Eso sí, la dimensión con la que se ha preparado y rodado es llamativa no solo en las cifras que nos han dado: esos 10 millones de euros, más de 100 localizaciones, 2.000 figurantes y casi 200 actores. La dimensión también se nota en el planteamiento de la dirección de fotografía, la realización, la banda sonora y todos los demás elementos técnicos y artísticos que cuentan con una detallada concreción y unos más que aceptables estándares.
La iluminación de Pau Esteve Birba (Caníbal, Hermosa juventud, Ahora o nunca, Proyecto Lázaro, El autor) crea la atmósfera y el clima que el guion reclama. Ese balance entre lo oscuro y la claridad exagerada influyen en los acentos dramáticos con solvencia. Aunque sea la primera vez que trabaja con Alberto Rodríguez, Esteve ha sabido adoptar el papel que para el director sevillano tiene este elemento en la filmación y montaje. De hecho, gracias a ello, Rodríguez luce una serie de planos ascendentes, que hemos visto en sus otras películas, y que editorializan y caracterizan el conflicto sin caer en el esteticismo.
Finalmente, la música de Julio de la Rosa vuelve a acompañar y narrar una producción de este cineasta, con el protagonismo preciso dentro de cada capítulo.
Concienzuda en su manera desplegarse visual y argumentalmente, La peste deja un poso de tristeza por el pesimismo y oscuridad con el que se asoma al hombre, sea del siglo que sea.
Firma: Lourdes Domingo
Género: Serie
Subgénero: Drama
Año: 2018
Cadena: Movistar Plus+
Intérpretes: Luis de Zúñiga, Manuel Solo, Pablo Molinero, Paco Tous, Patricia López, Patricia López Arnaiz, Sergio Castellanos
Presentador: -
En medio de una ciudad en esplendor y decadencia, como la Sevilla de la segunda mitad del siglo XVI, Mateo debe resolver una serie de asesinatos si quiere librarse de la condena que pesa sobre él. La Inquisición le declaró hereje debido a las ideas que difundió desde la imprenta que regentaba.
Título original: La peste
Creador: Alberto Rodríguez, Rafael Cobos
Director: Alberto Rodríguez
Guión: Alberto Rodríguez, Fran Araujo, Rafael Cobos
Productora: Atípica Films, Movistar
Duración: 50'
País: España
Temporada: 1