Los misterios de Laura

La serie aborda, con tintes de comedia, casos policíacos a los que debe enfrentarse una mujer que, a simple vista, parece poco cualificada para ejercer de detective. María Pujalte interpreta, con soltura, el papel protagonista adoptando un carácter despistado que afronta con decisión, más por ingenuidad que por valentía, los casos desde una perspectiva muy personal. Su temperamento meticuloso, observador y deductivo le llevan a analizar las pruebas de la misma forma que lo harían Colombo, la Sra. Flecher o Sherlock Holmes. No obstante, aquí acaban los parecidos con las series citadas, ya que se trata de productos y procedencias incomparables.

Los misterios de Laura aportan a la ficción seriada española una óptica amable y atípica con la que se intenta ofrecer un pasatiempo ligero. Las tramas, con algunos desajustes tolerables, nadan entre la comedia y el drama proponiendo un juego de pistas y detalles que el espectador puede seguir.

El elenco de personajes está bien definido y, cada uno de ellos aporta su riqueza a la trama. Puede ser que los estereotipos sean más comunes de lo deseable y las historias un poco predecibles pero, también es verdad que esta ficción no busca ni rigor ni seriedad en sus propuestas.

El misterio, la casualidad y la sencillez sustituyen a la acción, los efectos especiales, las técnicas novedosas de investigación y los grandes decorados de otras grandes producciones. Estas características actúan con eficacia y, además, se adornan con toques de humor bastante convincentes.

Una de las cualidades de esta serie es la ausencia de excesos de sangre y crueldad y uno de sus defectos es, quizá, algún giro torpe de guión que puede desconcertar. Pese a todo, la serie se deja ver sin mucha dificultad por aquellos que no busquen una historia de Agatha Christie sino un trivial entretenimiento.

Firma: Mar Pons