
Rithy Panh vuelve a retratar el conflicto de Camboya en un film visualmente atractivo. Su película es la representación de un genocidio silenciado, hecho de figuritas de arcilla y capas de mentiras.
Rithy Panh vuelve a retratar el conflicto de Camboya en un film visualmente atractivo. Su película es la representación de un genocidio silenciado, hecho de figuritas de arcilla y capas de mentiras.
Este documental en el que convergen arte e historia indaga, con ritmo pausado, en la incansable lucha de Borromini por obtener el éxito y el renombre merecidos frente a su enemistad con Bernini.
En esta odisea visual, la suma de efectos especiales, la captura de movimiento del reparto y la construcción ambiental permiten un disfrute máximo. Aunque quizás un poco larga, es una propuesta muy disfrutable.
Un thriller político basado en los últimos meses de vida del diplomático Dag Hammerskjöld. Entre lo factual y lo íntimo, la película encuentra su valor en el elogio a la honestidad, la paz, la justicia y el bien colectivo.
Una divertida comedia romántica que atiende a nuestra actualidad política. Con un reparto solvente, esta propuesta hará disfrutar al espectador y le animará a detenerse y a pensar sobre ciertas actitudes.
Un melodrama al más puro estilo clásico donde destacan la música, la hermosa fotografía del paisaje y un magnífico Mads Mikkelsen. Tras la historia queda un mensaje sobre valorar lo importante en la vida.
Una gran épica que se aproxima a la figura de Napoleón y a su relación amorosa con Josefina. El superficial y, a veces, tedioso devenir de los acontecimientos encuentra su atractivo en el trabajo de Phoenix y Kirby.
Precuela de Los juegos del hambre que mantiene rasgos de sus antecesoras e indaga más en alguno de sus mensajes. Pese a algún desequilibrio de guion y la dureza del contexto, el elenco consigue elevar el conjunto.
Sin un solo disparo ni una gota de sangre, Andreas Fontana logra transmitir la violencia y el miedo de la dictadura militar en Argentina durante los 80. Aún con gran ambientación e interpretaciones, puede resultar un tanto lenta.
La sucesión de temas sobre los que reflexionan los personajes no se plantea con excesivo acierto, pero sí con un ritmo ágil, un reparto veterano, alguna moraleja interesante y una factura técnica a la que no se le pueden hacer reproches.