
Patrick Mark no arriesga y presenta una propuesta discreta pero efectiva en su acercamiento al piloto escocés. Entretenida principalmente para los fanáticos de las carreras, en ella también subyacen valiosos mensajes.
Patrick Mark no arriesga y presenta una propuesta discreta pero efectiva en su acercamiento al piloto escocés. Entretenida principalmente para los fanáticos de las carreras, en ella también subyacen valiosos mensajes.
Martín Benchimol dirige una especie de documental acerca de una empleada doméstica y su hija que han heredado un castillo. No obstante, el film solo genera preguntas para las que no tiene ninguna respuesta.
Laura Baumeister de Montis presenta una historia de separación entre una hija y una madre que, con una fotografía desgastada y una música amenazante, encuentra el equilibro entre lo real y lo onírico.
To Leslie es un esperanzador relato de una adicción que cuenta con una gran dirección y una mejor interpretación de su brillante protagonista. Aunque al principio no lo parezca, es una bonita historia de redención.
El documental logra resquebrajar la imagen construida por la prensa del grupo A-ha. Su montaje es agradable, creativo y consigue captar la atención de todo aquel mínimamente interesado en la banda.
Piedra noche aborda el duelo por la pérdida de un familiar de manera original, mezclando drama y fantasía. A pesar de ello, el resultado del conjunto final es lento, repetitivo y, por momentos, ligeramente inverosímil.
Helena de Llanos rinde homenaje a Fernando Fernán Gómez y Emma Cohen en una película muy particular. Aunque la técnica está trabajada, el guion no sigue una coherencia lógica y resulta excesivamente desconcertante.
Esta sobrecogedora entrega destaca por las interpretaciones (con James Norton a la cabeza del reparto), la banda sonora y una fotografía que logra sumergir al espectador en un (intenso) viaje emocional.
Aunque de corta duración y poca variedad formal, este impactante y emocionante film tiene como protagonistas a dos militantes políticos que sufrieron amenazas y atentados que casi les supusieron su muerte.
El segundo largometraje de Lara Izagirre cohesiona muy bien un argumento medido, un elenco verosímil y lleno de naturalidad, una fotografía y dirección artística eficaces y un final bien cerrado.