
Introspección, reflexión y diversión en un recorrido en caravana a través de Europa: estas son las claves de un film protagonizado por dos excelentes actores y enmarcado en una serena fotografía que presenta al público una tierna trama.
Introspección, reflexión y diversión en un recorrido en caravana a través de Europa: estas son las claves de un film protagonizado por dos excelentes actores y enmarcado en una serena fotografía que presenta al público una tierna trama.
Richard Curtis, de la mano de un vistoso Danny Boyle, busca de nuevo al espectador cómplice de sus películas donde mezcla amor, comedia y un toque de fantasía.
Jim Jarmusch sella una película que bascula entre la parodia, la revisión y la meta reflexión sobre el cine de zombies y la sociedad actual. No funciona al completo, pero contiene elementos y pasajes que permiten destacar su idiosincrasia.
Álvaro Díaz Lorenzo une a dos grandes de la comedia española (Dani Rovira y María León) por primera vez para protagonizar una comedia de bromas masticadas y guion soporífero.
Gail Mancuso se encarga de dirigir esta segunda parte del film perruno. En esta ocasión, también se nos muestra una historia cuyo público está poco definido ya que el fondo es para adultos, pero la forma es infantil.
F. Gary Gray (Fast & Furious) dirige a Chris Hemsworth y Tessa Thompson, que ya habían formado pareja en Thor Ragnarok, en una nueva aventura de Los Hombres de Negro. El film convence como entretenimiento, aunque no cabe esperar mucho más.
Una comedia ligera, con un toque muy suave de drama, sobre cómo afrontar la recta final de la vida. Diane Keaton sabe estar, a pesar de pompones y maillots, en un esquema que promete poco y es lo que da.
Esta comedia gaditana (con director madrileño) quiere destacar como una historia social con personalidad, pero se queda a medio camino y resulta ser la “típica españolada”.
Sara Hirtt debuta en su primer largometraje, donde pone todo de su parte para dejar claro lo controvertidas que pueden ser las relaciones entre hermanos. De compás lento y con buenas interpretaciones, se trata de un estreno para miradas de tendencia intimista.
Infiltrado en Miami intenta recrear la magia de los buddy cop movies de los años 80. Sin embargo, la escasa originalidad de la propuesta resulta en una experiencia muy predecible.