
Justin Spitzer lidera, con America Ferrera como protagonista, esta longeva sitcom que abunda en sacar jugo a los ambientes profesionales. Esta vez, una gran superficie comercial da juego para tópicos y también para aciertos.
Justin Spitzer lidera, con America Ferrera como protagonista, esta longeva sitcom que abunda en sacar jugo a los ambientes profesionales. Esta vez, una gran superficie comercial da juego para tópicos y también para aciertos.
Un título sencillo sobre las peripecias de una familia en un pueblo de poca monta. Aunque tiene un arranque insustancial, la serie mejora hasta acabar siendo correcta, tierna y entretenida.
Ratched es una serie de crímenes y de maldad. Precuela sobre la perversa enfermera de la magnífica película de 1975 “Alguien voló sobre el nido del cuco”. Con un exceso de violencia y sexo que inunda y desfigura esta escalofriante serie.
Lilti avala como creador, realizador y guionista una producción televisiva que desarrolla los ingredientes de sus anteriores títulos. Conflictos personales y del sistema sanitario captan, con serenidad, la atención del espectador.
La primera expedición a Marte se embarca en una aventura que no es solo espacial. Sentimientos encontrados, esperanzas y retos en esta apuesta tranquila y profunda.
Madison Reyes protagoniza este título de Kenny Ortega. Sin ser especialmente novedoso, incorpora todos los elementos para gustar al público adolescente, incluyendo los números musicales.
El drama de dos vidas se cruzan por accidente en esta comedia plagada de estereotipos. Una ficción poco creíble pero eficaz.
Esta segunda entrega mantiene el foco en unos superhéroes que son unos villanos sociópatas de gran calibre. Sigue el clima de violencia algo enfermiza, atemperado por una sólida narración y otros personajes con algo más de luz.
Entre la nostalgia y las aventuras adolescentes se desarrolla esta ficción que no se luce por falta de novedad. Cobra Kai se deja llevar por la inercia actual de crear productos de fácil consumo.
La narrativa en torno al ascenso al poder de Catalina la Grande es desorbitada y absurda, con la finalidad de provocar carcajadas. La interpretación del elenco es brillante pero los excesos de los aristócratas agotan al espectador.