Netflix nos trae el primer live action de los mangas de One Piece. Estos ocho episodios de aventuras y batallas resultan un canto al optimismo, a la amistad y al trabajo en equipo.
Me desperté vampira es una serie de Netflix dirigida, exclusivamente, al público preadolescente. Una propuesta con muy buenas intenciones, pero con dificultades para llegar a buen puerto.
Encontrarse con el fantasma de Canterville siempre es un placer. Esta adaptación, que se hace corta, ofrece una nueva oportunidad para adentrarse en maravilloso relato de Oscar Wilde.
Caballero Luna abre las puertas a un personaje que podría dar mucho más a su audiencia pero se pierde en un espacio lleno de cosas inexplicables.
Nueve episodios de resentimiento y venganza. La propuesta de Prime Video pretendía ser una exaltación de los derechos de la mujer, pero resulta una explosión de odio contra el sexo masculino.
Oda a un clásico de los ochenta, con gran dosis de nostalgia, humor, fantasía y aventuras.
El aterrizaje de Maggie en Disney+ no llamaba la atención, pues parecía una comedia ligera y frívola. No obstante, se descubre como una serie dulce, divertida y bondadosa, que deja con ganas de más.
Una historia de fantasía protagonizada por adolescentes y dirigida a los mismos. Entretenida, bien narrada y con personajes enérgicos que dejan con ganas de saber más.
La carismática Miércoles Addams protagoniza una serie visualmente sugestiva, entretenida en su argumento y donde el humor y el terror mantienen una reñida pelea.
Ambientada en el universo creado por J.R.R. Tolkien, esta superproducción de Amazon no convence a muchos, pero entretiene a otros tantos.