
Aunque Diamantes en bruto no aporta nada nuevo al género, es la película donde Adam Sandler hace la mejor interpretación de su carrera: una persona obsesionada con su negocio y con serios problemas de ludopatía.
Aunque Diamantes en bruto no aporta nada nuevo al género, es la película donde Adam Sandler hace la mejor interpretación de su carrera: una persona obsesionada con su negocio y con serios problemas de ludopatía.
Noah Baumbach se acerca con lupa al drama de una separación. Su modelo de puesta en escena y de guion es fresco, aunque su relato sea punzante y logre no solo unas excelentes interpretaciones sino un retrato intenso.
Hopkins y Pryce fascinan en sus papeles con una caracterización física impoluta. No obstante, la posible explicación de lo sucedido en torno a la transición de los papas roza varias veces lo absurdo.
Scorsese presenta un viaje retrospectivo a la vida de Frank Sheeran en su última obra maestra, con magníficas interpretaciones. La historia tiene un alcance de gran magnitud, que justifica la larga duración.
Sánchez Arévalo retorna con una drama social y humano combinado con un sano sentido del humor. Los vínculos familiares se presentan como la salvaguarda de unos protagonistas excelentemente interpretados.
Roma es la mejor película de Alfonso Cuarón. En ella, como otros grandes cineastas, recuerda y revisita su infancia en un trama bellísima y muy cuidada.