
Prince of Persia: The Lost Crown es el ejemplo perfecto de cómo poner al día un clásico.
Prince of Persia: The Lost Crown es el ejemplo perfecto de cómo poner al día un clásico.
Un drama ambientado en la cordillera del Himalaya que se intenta vestir de thriller. Pese al irregular guion, el diseño de producción, los valores enfatizados y Miguel Herrán permiten estabilizar al conjunto.
Inner Ashes es Walking simulator con puzles que nos explica la historia de Henry, enfermo de Alzheimer.
La aventura de una pareja de zorros árticos es una especie de cuento narrado sobre imágenes reales de nuestra flora y fauna. Tras la peripecia enfocada a los más pequeños, se halla un fuerte mensaje sobre el cambio climático.
Los creadores de ‘Gru mi villano favorito’ nos presentan una historia que no sorprende por su temática, pero consigue no decepcionar y resulta una película divertida y entretenida, perfecta para ver en familia.
Una película llena del espíritu navideño a través del ensalzamiento de valores asociados a este. Una historia sencilla y ágil para que los mayores puedan compartir un rato con los más pequeños.
Paul King presenta un entrañable musical sobre los inicios de Willy Wonka. Con un gran reparto liderado por un carismático Timothée Chalamet, los números musicales y los valiosos mensajes le ponen la guinda al pastel.
Haha, Hehe, Hihi, Hoho y Huhu llegan desde Clan TV a salas de cine en una aventura más larga que sus habituales. Con las mismas texturas y montajes similares, la cinta está especialmente dirigida al público preescolar.
En unos cálidos escenarios que combinan diferentes técnicas de animación se desarrolla una historia dirigida al público de menor edad que subraya importantes valores y transcurre entre canciones pegadizas.
Una inesperada secuela que, ambientada en el conocido mundo de animación, esconde una oda a la amistad y al camino para cultivarla correctamente. Pese a un par de escenas truculentas, el film es amable y esperanzador.