Andre Haigh presenta un drama con poderosa personalidad y un sólido guion. Junto a él, sus dos protagonistas conceden unas soberbias interpretaciones.
Un drama fantástico con influencias góticas y barrocas que destaca por una magnífica puesta en escena, pero acaba aburriendo por el sinsentido en el que se convierte.
Con un inicio prometedor y un planteamiento, a priori, que se mostraba interesante y necesario, el film acaba siendo víctima de un inconsistente guion.
Un retrato detallado y gratificante sobre la lucha de las mujeres por el voto femenino en Inglaterra. Sobre este, una trama potente, grandes interpretaciones y una ambientación y estética admirables.
Una ópera prima con grandes aciertos como la banda sonora y la fotografía, pero con una insustancial historia que oscila entre lo corriente y lo inverosímil.
Una adaptación del clásico de Lorca donde resaltan los aspectos técnicos y la visión de la directora. Sin embargo, la narración queda en un segundo plano, tratada con menos esmero.
Una prescindible y aburrida adaptación de la novela de Diderot. La suma de un cúmulo de incoherencias narrativas y la carencia de ritmo llevan a convertir al film en una experiencia desconcertante.
Un drama cotidiano sobre un matrimonio a la deriva. La propuesta hiperrealista junto a los reveladores silencios hacen del film un crudo relato sobre el desamor.
Pablo Fendrik nos adentra en la selva amazónica con su tercer largometraje. Partiendo de un sólido guion, la trama de venganza prescinde de una violencia injustificada y hace brillar a sus personajes.
El director Lanthimos se estrena en su primer largometraje en inglés con una historia confusa donde establece una forma coherente y un fondo que incomoda y descoloca al espectador.