
Si no se tienen demasiadas expectativas, ni se compara con la original, es una buena propuesta para los amantes del género que quieran pasar un buen rato. Además, sus decisiones éticas en general buscan el bien.
Si no se tienen demasiadas expectativas, ni se compara con la original, es una buena propuesta para los amantes del género que quieran pasar un buen rato. Además, sus decisiones éticas en general buscan el bien.
Laurie Strode se enfrenta una última vez a Michael Myers en una entrega que sigue la línea de sus predecesoras. Continúa buscando la tensión y el espectáculo a través de sustos fáciles y una violencia muy gráfica.
La saga de terror que arrancó a finales de los 70 retorna con sus dos estrellas: Jamie Lee Curtis y el enmascarado Michael Myers. El resultado no dista mucho de la reiteración violenta y absurda de las predecesoras.
Esta esperada secuela de la mítica película de John Carpenter supone un excelente lucimiento de Jamie Lee Curtis, mientras el terror no aterroriza y solo se basa en sustos.