
Ruben Östlund articula una crítica muy divertida sobre la alta esfera social y el capitalismo extremo. Aun con escenas acertadas, el film resulta grotesco e irregular por momentos, lo que puede desalentar a cierto público.
Ruben Östlund articula una crítica muy divertida sobre la alta esfera social y el capitalismo extremo. Aun con escenas acertadas, el film resulta grotesco e irregular por momentos, lo que puede desalentar a cierto público.
Esta coproducción entre España y México es una divertida comedia con un choque cultural interesante. Cuenta con momentos divertidos y un mensaje repetitivo sobre la tolerancia pero, en general, es un film irregular y predecible.
Aunque se trata de una historia mil veces contada, El piloto es una película que cumple su objetivo. Proporciona más de hora y media de acción, diversión y grandes interpretaciones que mantienen en tensión hasta el final.
Los Fabelman tiene una estética agradable y desprende gran cariño por el séptimo arte. De todas maneras, su dulzura quizá es excesiva y resulta en pequeñas incoherencias de guion, que restan fuerza al mensaje.
Sadiq retrata los infortunios de una familia de clase media pakistaní en un largometraje triste con algún toque de humor. Aunque sus personajes estaban bien construidos, la falta de rumbo hace desmerecer al conjunto.
A pesar de un inicio prometedor, el film va perdiendo efectividad a medida que avanzan las conversaciones en una cabaña del bosque. Parecía que Shyamalan iba a ofrecer más sorpresas de las que realmente quedan en pantalla.
Martin McDonagh reúne de nuevo a Colin Farrell y Brendan Gleeson en un triste film que propone una metáfora de la guerra. A pesar de la fotografía y las interpretaciones, el relato carece de verosimilitud en varios puntos.
La propuesta de Todd Field es perturbadora por momentos y excesivamente larga. Aunque cuenta con una deslumbrante protagonista y una música embriagadora, le falta cohesión y le sobran escenas de relleno.
Las aventuras de un gato que habla son el hilo de una divertida película que combina animación 3D y 2D. El film aproxima la lectura a los más pequeños a la vez que realza el valor de la amistad y el coraje.
David Earl y Chris Hayward han creado e interpretado a dos personajes entrañables que son capaces de hacer reír y emocionar. Con equilibrio acertado, el film es un relato cautivador sobre la amistad y la aceptación.