
Los chicos de Hawkins regresan en una temporada más adulta, divertida y terrorífica que mantiene el buen nivel con el que empezó la serie.
Los chicos de Hawkins regresan en una temporada más adulta, divertida y terrorífica que mantiene el buen nivel con el que empezó la serie.
Tres adolescentes se sumergen en una espiral de malas decisiones donde nada puede acabar bien. Un guión manipulado por sus creadoras que presenta una ficción venenosa, triste y desesperada.
Este viaje por alta mar naufraga por una narración torpe, unos pobres efectos visuales y una historia que no convence.
Basada en la novela gráfica homónima, esta serie es selectiva en su audiencia y variable en su contenido.
Acción, valentía y buenos sentimientos son las notas que caracterizan al protagonista de esta serie que evoca nostalgia. Hará sonreír a aquellos lectores que durante su adolescencia seguían esta serie de cómic de origen belga.
La liga de los justicieros de DC se llama Titanes. Una historia compuesta de muchas historias oscuras y violentas como sus propios héroes.
Una propuesta que reúne magia, hombres lobo y un cúmulo de cosas ya vistas pero bien presentadas.
Un nuevo formato con grandes posibilidades que defrauda desde su primera propuesta animada.
Oscuro e intrigante, este thriller psicológico mantiene la acción y el suspense a un ritmo frenético hasta el final.
Un producto lamentable para un público maltratado en la pequeña pantalla al que se le podrían ofrecer narraciones mucho más sugerentes, atractivas y motivadoras.