
Divertida serie de animales y detectives en la que los niños pueden buscar pistas para descubrir al culpable del caso. Ayuda a la concentración, a estar atentos a los detalles y a aplicar la lógica.
Divertida serie de animales y detectives en la que los niños pueden buscar pistas para descubrir al culpable del caso. Ayuda a la concentración, a estar atentos a los detalles y a aplicar la lógica.
La adaptación de unos libros infantiles a la pequeña pantalla pretende ser el producto ideal para preadolescentes y lo hubiera conseguido si no hubiera tenido la necesidad de modernizarse.
Desde Australia nos llega una serie sobre niños que resuelven misterios. Un acierto que esta vez la trama se limite a problemas y conclusiones acordes a la edad y a las capacidades de sus protagonistas.
Gracias a su fuerza de voluntad, capacidad de trabajo y afán de superación Madam C.J. Walker pasa de ser una humilde lavandera a una prestigiosa empresaria preocupada del progreso y la mejora de la mujer afroamericana en una sociedad hostil a su raza y a su condición femenina.
La cara oculta y el rostro visible de The office lideran una nueva comedia, no tan eficaz, que emplea otros recursos visuales y dramáticos para hacer humor y generar cierto suspense en medio de situaciones disparatadas.
The last dance (el último baile) así llamó Phil Jackson, entrenador de los Chicago Bulls, a la temporada 1997/98, la que sería su última como entrenador
Llegan más gatos a la pequeña pantalla, esta vez desde Italia. Con su modo de comportase muestran al público infantil la importancia de la amistad, el compañerismo y el trabajo en equipo.
Interesante miniserie sobre la huída de una joven judía de su comunidad ultra-ortodoxa en Nueva York.
La historia se desaprovecha por completo y da como resultado un producto frívolo por momentos en el que abundan, además, las conversaciones sobre sexo. Aún así, cuenta con varios elementos originales.
Virgin River es un lugar apartado al que acudir para empezar de nuevo. Un título sobre segundas oportunidades que pone en pausa nuestras neuronas para, después, recuperar la vida real con un punto de optimismo.