
Una digna obra de animación con mayores ambiciones de las que logra cumplir. Sin embargo, ofrece una aproximación valiosa al terror de la guerra para los más pequeños y ensalza el poder del arte y la familia ante ella.
Una digna obra de animación con mayores ambiciones de las que logra cumplir. Sin embargo, ofrece una aproximación valiosa al terror de la guerra para los más pequeños y ensalza el poder del arte y la familia ante ella.
El regreso de una de las mejores sagas del universo Dragon Ball.
El film de Jake Kasdan quiere aprovechar el tirón de la temporada para ofrecer una historia fantástica con acción continua, un reparto conocido y múltiples referencias aleatorias a otras producciones.
Un biopic sobre los ocho años de presidencia de Reagan que, pese a una correcta realización alternada con flashbacks, se excede en el uso del maquillaje y en su manifiesta actitud laudatoria.
Shin Chan regresa en una aventura con elementos alejados de sus historias corrientes, pero con su pervertida e incorregible característica forma de ser. El cambio de animación tampoco ayuda a disfrutar de su visionado.
Esta trepidante propuesta de animación es más amable que las producciones de carne y hueso. Pese a sus deslices y el componente político, ofrece una buena dosis de acción que prima el disfrute para un amplio público.
Un reloj que permite retroceder el tiempo es el detonante de una conmovedora historia que reflexiona sobre el amor y la familia. El reparto hace un gran trabajo con unos personajes cuya evolución es interesante.
Un drama de catástrofes que sabe llevar sus torbellinos precipitados e impersonales para acabar entregando un resultado, al menos, entretenido. La acción trepidante y los rostros conocidos ayudan a ello.
La habitual comedia veraniega de Santiago Segura llega con todos los ingredientes que sus seguidores esperan: muchas bromas, diferentes enredos y unos personajes que nos han acompañado los últimos cinco años.
Scarlett Johansson y Channing Tatum lideran una romántica comedia espacial. Aunque parte de un hecho histórico, la película se desenvuelve convincentemente por la ficción y deja un buen sabor de boca.