
El gran equipo de actores no profesionales, liderados por un espléndido David Verdaguer, transmite de manera optimista cómo lidiar con la enfermedad y el bullying en una clase de primaria. Un título sobre el que vale la pena reflexionar.
El gran equipo de actores no profesionales, liderados por un espléndido David Verdaguer, transmite de manera optimista cómo lidiar con la enfermedad y el bullying en una clase de primaria. Un título sobre el que vale la pena reflexionar.
Grozeva y Valchanov retornan con una nueva historia anclada en la desconocida, para nosotros, Bulgaria. Drama, realismo, humor y fina ironía son algunas de las muchas virtudes de su propuesta.
Achero Mañas regresa con una propuesta muy personal, aunque sin ser del todo autobiográfica. A pesar del excelente elenco y de algunos aspectos originales, el despliegue del guion resulta algo plano y reiterativo.
El paso de Swale de los escenarios londinenses a la gran pantalla se salva, sorpresivamente, con más luz en la puesta en escena y captura del espacio que en la construcción de un guion que, en realidad, coquetea con el culebrón.
Andrea Fandós encandila con su actuación en una cinta que pone de manifiesto las carencias en la educación sexual de los 90 en España. La ambientación está muy cuidada y evoca cierta nostalgia.
Una excusa con la que ofrecer sexo “apto” para adolescentes en la gran pantalla. Un film carente de argumento, donde los personajes secundarios están de relleno y no vemos más que escenas sexuales, enfados y reconciliaciones.
La mezcla de géneros y el gran cuidado del contenido visual resta relevancia a la trama y a los protagonistas, con lo que resulta una película poco coherente. Aunque sea complicada de entender, su ambientación es hipnótica.
Pinocho regresa a la gran pantalla en una adaptación más fiel al cuento y con un gran diseño de producción. Aunque intenta dirigirse tanto a niños como a adultos, no logra satisfacer a ninguno de esos grupos.
La veterana Icíar Bollaín logra una comedia dramática, de tintes costumbristas, que mete de lleno al espectador en la problemática de la conciliación entre lo personal y lo vinculante hoy en día. Impecable el elenco.
El remake de la novela homónima de Frances Hodgson Burnett llega con unos increíbles efectos visuales que restan trabajo a la trama y al desarrollo de personajes. Un film ligero, inocente y bonito.