
El paso de Swale de los escenarios londinenses a la gran pantalla se salva, sorpresivamente, con más luz en la puesta en escena y captura del espacio que en la construcción de un guion que, en realidad, coquetea con el culebrón.
El paso de Swale de los escenarios londinenses a la gran pantalla se salva, sorpresivamente, con más luz en la puesta en escena y captura del espacio que en la construcción de un guion que, en realidad, coquetea con el culebrón.
El remake de la novela homónima de Frances Hodgson Burnett llega con unos increíbles efectos visuales que restan trabajo a la trama y al desarrollo de personajes. Un film ligero, inocente y bonito.
La ópera prima de Shannon Murphy arranca con un relato curioso y una estética interesante, pero acaba cansando al abusar de los mismos recursos y no desarrollar la historia. Un film extravagante y muy colorido.
Esta película de animación, basada en el éxito de ventas de John Bunyan de 1678, resulta una propuesta sencilla pero, absolutamente, adecuada para trabajar en familia o en la escuela valores universales.
Un film de Reed Morano que tiene una trama inicial poco innovadora y un guion deficiente. Su única sorpresa es lo ineficiente que es su protagonista (Blake Lively) a la hora de matar.
Esta historia de la relación entre una mujer adulta y un menor cuenta con un inicio interesante que acaba ahogado por escenas predecibles e inverosímiles. A pesar de las correctas interpretaciones, la propuesta resulta absurda.
Equilibradas dosis de sustos, pausas y tensión en una historia donde lo más aterrador es justo lo que no se ve ni se cuenta. Elisabeth Moss obnubila con su brillante interpretación de un personaje contenido.
Nakache y Toledano abundan en los asuntos sociales y humanos de su filmografía, sin abandonar el sentido del humor. Esta vez, consiguen emocionar y hacer sonreír, mientras ilustran las severas dificultades de los jóvenes con autismo.
Impactante drama disfrazado de comedia. A partir de la pieza escénica de Ignasi Vidal, Polo Menárguez ofrece una trama donde el ritmo y la brillante dirección de actores desembocan en un final de esquinazo.
Un relato de superación y dolor que combina, por extraño que parezca en esta temática, realidad con fantasía. La animación al estilo manga resalta por la delicadeza con la que se trata la historia.