Esta roadmovie es optimista, afable y con una gran banda sonora. Aunque mezcla añoranza y un humor grácil para tratar de introducir la revuelta a las nuevas generaciones, termina siendo un intento fallido de revivir la cultura mod.
Con excesiva longitud y con maestría en no pocos pasajes, el film de Hamaguchi habla con sugerencia de las heridas personales. La metáfora del coche y de la obra de teatro completan la fuerza de su trama.
Con altibajos en la cohesión dramática, con un argumento cargado de sobresaltos morales, pero con una actriz sólida como protagonista y una ambientación excelente, así es esta mirada a Tammy Faye.
Un relato bien ambientado sobre la biografía de Petra de San José, fundadora de la Congregación de Madres Desamparadas, pero que no logra trascender más allá de su público objetivo inicial.
Juliette Binoche deslumbra como trabajadora de limpieza en un film que denuncia la precariedad laboral y la diferencia de clases. Su discurso es irregular y plantea cuestiones complejas pero deja una sensación general agradable.
François Ozon regresa con una adaptación de la novela de una de sus colaboradoras y amigas. A pesar del tema y del respeto con que aborda a los personajes, el film resulta algo apagado y gélido.
La relación entre Karen Blixen y Thorkild Bjørnvig es la base de un largometraje denso con imágenes perfectamente estudiadas. El elenco hace un gran trabajo e invita a la reflexión sobre la fidelidad y la felicidad.
Una película madura y brillante, sembrada de emoción y violentamente honesta que, en ningún caso, debe pasar desapercibida. El cine nos llama. Acudan en masa.
Personas utilizadas como monstruos, sentido escénico y del drama, humor y tragedia, mezcla de realismo y fantasía y un juego de ambiciones y pasiones, así es esta adaptación literaria de Guillermo del Toro.
Las hermanas Williams coproducen este film sobre cómo el tesón de su padre las condujo a la cima del tenis mundial. Convencional y bien interpretada, contiene algunos pasajes más inconexos y que la alargan en exceso.