
Un adentramiento de pesadilla en un caso que mezcla el terror con el mejor thriller. Con una puesta en escena cuidada, Maika Monroe lidera convincentemente y Nicolas Cage atemoriza tremendamente.
Un adentramiento de pesadilla en un caso que mezcla el terror con el mejor thriller. Con una puesta en escena cuidada, Maika Monroe lidera convincentemente y Nicolas Cage atemoriza tremendamente.
Nueva adaptación cinematográfica de otro tomo de la aclamada saga literaria danesa. Un duro caso, no apto para todas las sensibilidades, que hará las delicias de los fans y los amantes del thriller, pero poco novedoso en sus formas.
Un difuso drama social que intenta ser comedia por momentos, aunque no lo logra. Pese a la representación de relaciones sanas y el planteamiento de importantes temas, se dispersa demasiado y pierde fuerza.
Un documental que explora el más allá desde un encaje forzado entre ciencia y religión. Resulta monótono y dispone de un montaje impostado, pero destaca visualmente y abre espacio para abordar temas vitales.
Un drama romántico que, pese a una estructura poco novedosa, sabe desenvolverse con soltura. Con una gran química protagonista, la historia convence como ópera prima y complacerá a los amantes de este género.
Un drama de catástrofes que sabe llevar sus torbellinos precipitados e impersonales para acabar entregando un resultado, al menos, entretenido. La acción trepidante y los rostros conocidos ayudan a ello.
Mientras siguen los estrenos de verano en salas, desde Contraste iniciamos una recopilación de distintos géneros de cine en casa para aseguraros un verano de calidad audiovisual. El primero de todos: ¡la animación!
Un reparto destacable y una interesante ambientación no son suficientes para levantar una historia con un difícil avance, un protagonista demasiado pasivo y una superficialidad que no resuelve su razón de ser.
Scarlett Johansson y Channing Tatum lideran una romántica comedia espacial. Aunque parte de un hecho histórico, la película se desenvuelve convincentemente por la ficción y deja un buen sabor de boca.
Jodie Comer guía con su voz esta documentación de un mundo de hombres y motores. Un ejercicio que deviene, igual que el libro homónimo, una inmersión en un contexto concreto y desde un prisma humanizado.